Pimientos, rica fuente de nutrientes en cualquier época del año

Los pimientos, especialmente los rojos, son vegetales que no pueden faltar en nuestra dieta por su contenido en nutrientes, sobre todo vitamina C. Esta verdura la podemos encontrar casi todo el año a excepción de los meses de verano, aunque si la consumimos en conserva, como ocurre con los pimientos del piquillo, podemos disfrutar de ellos todo el año y beneficiarnos de todos sus nutrientes.

Números estudios realizados sobre la composición nutricional de los pimientos demuestran que éstos son muy ricos vitamina C, sobre todo los de color rojo. De hecho, llegan a contener más del doble de la que se encuentra en frutas como la naranja o las fresas. Este contenido en vitamina C va disminuyendo desde el momento en que se recolecta el producto y hasta que se consume, por lo que es importantísimo tenerlo el menor tiempo posible en casa, así como comprarlo recién recolectado. Otra opción interesante en consumirlo en conserva, como puede ser el pimiento del piquillo que es envasado muy poco tiempo después de haber sido recogido.

La vitamina C es un elemento de gran importancia en nuestra alimentación, ya que es un poderoso antioxidante, por lo que actúa sobre el organismo como transportadora de  hidrógeno, interviene en la formación de tejido conjuntivo, regula la resistencia de los capilares sanguíneos, interviene en el crecimiento y reparación de la células de los tejidos, encías, vasos, huesos y diente. Ante estos beneficios La Organización Mundial de la Salud recomienda su habitual consumo a través de los alimentos ya que el nuestro organismo no es capaz de sintetizarla por sí sólo.

Los pimientos, además son buena fuente de carotenos, entre los que se encuentra la capsantina, pigmento con propiedades antioxidantes que aporta el característico color rojo a algunos pimientos. También es destacable su contenido de provitamina A (Beta caroteno y criptoxantina) que el organismo transforma en vitamina A conforme lo necesita; así como folatos y de vitamina E.

Todos estos nutrientes convierten al pimiento en una importante fuente de antioxidantes, sustancias que cuidan de nuestra salud, ya que contribuyen a combatir el efecto de los radicales libres en nuestro organismo. Por eso incorpóralos a tu dieta habitual, puedes prepararlos asados al horno, rehogados en una sartén, como ingrediente de un guiso, rellenos, etc. o de forma muy rápida y sencilla, abrir un bote de pimientos del piquillo ecológicos y disfrutar de todos sus nutrientes en cualquier momento.

Galletas de jengibre y naranja

Son fechas de preparar ricos postres o deliciosas galletitas para compañar nuestras celebraciones. Te proponemos una sencilla receta de galletas de jengibre que hará las delicias de toda la familia.

Ingredientes para 4 personas:

50 gramos de jengibre

100 de fécula de maíz o maicena

200 gramos de harina de espelta o trigo

1 huevo

100 gramos de azúcar moreno

200 gramos de mantequilla o margarina

Una pizca de jengibre molido

Sésamo tostado para adornar

1 c/c rasa de polvo levadura

1 c/c de canela molida

50gramos de mermelada de naranja

 

Elaboración:

Amasamos el jengibre y el resto de ingredientes y formamos una bola. Se envuelve en papel transparente y  se reserva durante 30 minutos en el frigorífico. A continuación, se extiende la masa sobre una superficie plana, se le dan formas (a su gusto)  y se colocan con cuidado en la bandeja del horno, se le ponen las semillas de sésamo e introducimos la bandeja en el horno precalentado a 180ºC durante 10 minutos. Dejamos enfriar las galletas en la rejilla (lo hacen rápidamente).