Ahora que el buen tiempo se va abriendo camino a paso firme, nos damos cuenta de esos kilos de más que hemos acumulado durante el invierno. Para recuperar la figura de forma saludable te proponemos que recurras a Mango Africano, un suplemento totalmente natural con la capacidad de inhibir la producción de grasas.
El mango africano, o Irvingia Gabonensis como se conoce científicamente, es un árbol originario de África Occidental donde las tribus han utilizado sus semillas durante milenios con fines terapéuticos. El mango africano también se utiliza tradicionalmente como ingrediente de numerosas recetas por su capacidad espesante.
El beneficio de las semillas de los frutos del Mango africano reside en su capacidad de actuar sobre determinadas enzimas y hormonas encargadas de regular el metabolismo de las grasas. Es el caso de la Leptina, hormona que producen las células adiposas reduciendo el apetito y convirtiendo la grasa corporal en energía.
Por otra parte, el Mango Africano aumenta los niveles de adiponectina, otra hormona que participa en el metabolismo de las grasas de tal forma que cuando aumenta esta hormona mejora el metabolismo de las grasas. A la vez que este fruto inhibe el glicerol-3-phosphato-deshidrogenasa, la enzima responsable de convertir los azúcares almacenados en grasa.
El alto contenido en fibra de este producto, presente de forma natural en el Mango Africano, favorece el arrastre de los depósitos grasos como el colesterol, regula el apetito ya que ejerce un efecto saciante, y regula el tránsito intestinal.
Por todo ello, el Mango Africano es el producto natural que mejor te ayuda a evitar que las grasas se acumulen en tu cuerpo. Empieza a hora a cuidar tu figura de cara al buen tiempo.