Los labios son, muchas veces, los grandes olvidados en las rutinas de belleza. Sin embargo, son muy sensibles a los cambios de temperatura, sobre todo, al frío, ya que junto a las manos están muy expuestos porque los llevamos al descubierto. Piensa que los labios están compuestos por una parte muscular, más la piel que la cubre y las glándulas salivares. Aunque no tienen glándulas sebáceas que los protejan frente al frío. También hay otros factores, como el estrés que pueden empeorar su estado.

Aunque no todos tenemos los labios iguales, la sensibilidad y finura de la piel del labio en general hace que sean frágiles y se puedan agrietar con facilidad. Incluso en ocasiones pueden incluso sangrar un poco. La buena noticia es que se pueden reparar rápidamente.

Por eso, para que puedas tener unos labios sanos, cuidados y bonitos te proponemos una serie de consejos que te ayudarán y mejorarán el estado de tus labios durante los próximos meses de frío, cuando sufren más que nunca.

El gran olvidado: el exfoliante

El primer paso que tenemos que realizar para un buen cuidado de nuestros labios es, también sin duda, un paso que la mayoría de las personas todavía no han incorporado: se trata de la exfoliación. Al exfoliarnos los labios conseguimos eliminar esas pielecillas que resultan tan incómodas y permitir que los productos que utilicemos después penetren mejor. Nuestra recomendación: aprovecha para exfoliarte los labios por la noche unas dos veces por semana junto a tu rutina para ayudar a regenerar la piel.

El bálsamo labial será tu gran aliado

Sin duda, tener un bálsamo labial a mano siempre nos ayudará a mantener nuestros labios hidratados y protegidos. Para ello, es importante repetir las aplicaciones a menudo. Además, te recomendamos utilizar el formato de barras labiales, ya que son una opción mucho más higiénica que los botes de vaselina.

Aplicar mascarillas para un plus de hidratación

Sobre todo, durante los meses de más frio, quizás necesites un extra de hidratación para mejorar el estado de tus labios. Puedes recurrir a las mascarillas reparadoras que, además se pueden preparar en casa utilizando aceites y miel. Lo ideal es que la apliques antes de irte a dormir y la dejes actuar toda la noche.

Por último, te recomendamos mantenerte hidratado y beber agua de forma regular. Además, de los múltiples beneficios que tiene para tu estado físico también te ayudará a hidratar tus labios.