La puesta a punto de tu piel para tratarla como se merece.
¿Quieres hidratar y nutrir tu piel para que luzca sana y bella? No basta con la crema diaria para conseguir que esté en las mejores condiciones. Para que tu ritual de limpieza e hidratación sea efectivo, la mejor opción consiste en realizar un peeling natural semanal o cada quince días, según tu tipo de piel. Con un peeling eliminas las células muertas que se acumulan en la parte superior de la piel, de forma que ésta queda mucho más limpia y respira mejor. Además, tras el peeling, tu piel puede absorber mucho mejor tus productos habituales de higiene y belleza. Casi de forma inmediata, notarás una piel más suave, con mejor aspecto y mucho más hidratada. ¿Quieres preparar tu propio peeling casero?
Los productos naturales son un gran aliado para prepararte un peeling casero y proporcionar una limpieza exhaustiva a tu piel. Eliminar las células muertas es el primer paso para que la piel se vea limpia y sana.
PEELING NATURAL
Algunos de los productos naturales que te van a servir como base son productos tan básicos como el azúcar de caña; la sal marina, que tiene un alto contenido en minerales, o incluso los posos del café.
Según el tipo de piel debes utilizar un grosor mayor o menor del producto, por ejemplo para pieles sensibles, el grano ha de ser lo más fino posible. Si además tienes la piel desvitalizada, la utilización de la sal marina será perfecta para aportar más minerales a la piel. Para potenciar los resultados, humedece siempre la piel antes de exfoliarla, con lo que además evitarás dañarla o posibles irritaciones. Y por supuesto, te aconsejamos que aproveches el momento después de la ducha o del baño, ya que tu piel se mostrará más receptiva porque los poros están más abiertos, y por lo tanto, se trata del momento ideal para aplicarte tu peeling.
TIPOS DE PIEL
Para pieles normales a secas, se recomienda una cucharadita de postre de sal fina del Himalaya o azúcar de caña con una cucharada de café de aceite de aguacate. En el caso de pieles maduras podemos añadir un par de gotitas de aceite esencial de geranio o ylang ylang.
Para pieles grasas, se recomienda la misma fórmula pero en vez de añadir aceite de aguacate, añadiremos aceite de jojoba, que ayuda a equilibrar la producción de sebo y un par de gotitas de aceite esencial de lavanda.
Para pieles sensibles, se recomienda utilizar sal del Himalaya extrafina con un chorrito de aceite de caléndula y 1 gota de aceite esencial de manzanilla.
PEELING CORPORAL
Y para el resto del cuerpo sólo tenemos que seguir la pauta anterior, pero utilizaremos un tamaño de grano mayor de sal del Himalaya o de azúcar de caña. Con la realización periódica del peeling, tus cremas reafirmantes, anticelulíticas o hidratantes, tendrán un mayor efecto porque la piel exfoliada las absorberá mucho mejor.